Dos poemas
Danilo Bueno
Somos los poetas de Dios
Somos los poetas del pueblo
Somos los poetas de la crítica
Somos los poetas doctrinarios
Somos los poetas eruditos
Somos los poetas modernos
Somos los poetas de la tecnología
Somos los poetas posutópicos
Somos los poetas de los estilos históricos
Somos los poetas de lo real
Somos los poetas del fin de semana
Somos los poetas canónicos
Somos los poetas de carrera y oficina
Somos los poetas puros
Somos los poetas sin cualidades
Somos los poetas municipales
Somos los poetas de las minorías
Somos los poetas de las buhardillas
Somos los poetas traductores
Somos los poetas académicos
Somos los poetas malditos
Somos los poetas blogueros
Somos los poetas de los poetas
Somos los poetas de las capillitas
Somos los poetas contemporáneos
Somos los poetas épicos
Somos los poetas portugueses
Somos los poetas experimentales
Somos los poetas celebérrimos
Somos los poetas accionistas
Somos los poetas de la tropicália y el samba
Somos los poetas de la poeticidad
Somos los poetas de los galardones y el jurado
Somos los poetas del cuerpo del amor del síncope
Somos los poetas de la obra diamantina
Somos los poetas de los baños públicos
Somos los poetas visionarios
Somos los poetas cosmopolitas
Somos los poetas del silencio
D’ailleurs c’est toujours les autres qui meurent
Y los muertos y los semivivos y los que después van a morir.
Una plaza se vuelve estacionamiento
Una esquina se vuelve estacionamiento
Un caserón centenario caído estacionamiento
Los estacionamientos cierran cuadras enteras
Los valets parking conducen estacionamientos invisibles
Un edificio utiliza tres subsuelos de estacionamiento
Toda la calle a la izquierda
Hay estacionamiento sólo para motos
El gigante estacionamiento del supermercado
Macunaíma confundió personas con carros
Los carros no paran los carros no paran
De salir de las casas de los condominios de cinco espacios
Hay estacionamientos pagados con monedas
Y los que no aceptan tarjeta, hay estacionamientos
Con fila de espera y área para fumadores
El Cine Tangará se volvió un estacionamiento
(dijeron)
Las zonas peatonales fueron expropiados estacionamientos
En el aeropuerto el estacionamiento no tiene rumbo
Accesos y salidas son estacionamientos fortuitos
Las casas son estacionamientos cerca de los estadios
Demoliciones, aún con azulejos a la vista,
Estacionan la oferta de los comercios
Y aún todos los otros carros
Encendidos
Sin estacionamiento
En la fila ficticia de las calles
Traducción de Sergio Ernesto Ríos.
Danilo Bueno (Mauá, 1979). Es doctor en Letras por la Universidade de São Paulo, profesor de Literatura y de Ajedrez Escolar. Ha publicado los libros de poesía Fotografias (Alpharrabio Edições, 2001), crivo (Alpharrabio Edições, 2004), Corpo sucessivo (Oficina Raquel, 2008), Dia útil (Lumme Editor, 2011), Uma confissão na boca da noite (Editora Córrego, 2013), Para viver automaticamente (Editora Córrego, 2016) y Sete e meio (Editora Urutau, 2020).