Aún no acabó
Érica Zíngano
estoy tratando de encontrar un poema
un borrador de un poema que escribí
hace algunos años
donde hablo de que quería moler
a mi madre
a palos y colocar
los restos de ella molida
en una bolsa de plástico
como si fuera una nueva placenta
y después colocar la bolsa en la basura
porque el camión de la basura
siempre viene a recoger la basura
de mi edificio de noche
los lunes miércoles y viernes
entonces los hombres del camión
se llevarían la bolsa de plástico
con ella molida adentro
para el basurero público de la ciudad
que yo no sé bien dónde queda
pero sé que queda
muy lejos de aquí
y pronto
comenzaría así una nueva fase
de mi vida
no encuentro más ese poema
no tengo idea si ese borrador
aún existe
pero tengo la impresión de que
en aquella época
yo no estaba tan preocupada
en la riqueza de los detalles
creo que no hablaba de la placenta
ni del basurero
estaba sólo concentrada en los palos
independientemente de haber o no
hablado del basurero
van a llamarme ingrata
hija desnaturalizada y decir
que no tengo corazón
ya intenté resolver esto*
*esto=las ganas de moler
a mi madre que siento
de vez en cuando y el juicio
negativo de las personas sobre este
mi posible acto de liberación interior
de varias formas
hasta constelación familiar
hice el año pasado
me aconsejaron
entonces lo hice
tomé 900 pesos
que mi madre me dio
y pagué 900 pesos
por la sesión
y me hicieron creer
porque yo estaba sugestionada
por técnicas psicológicas
de persuasión
que mi madre era una almohada
roja
y que el dolor que comencé a sentir
en mi pierna izquierda
en el momento en que estaba hablando
mal de ella
estaba relacionado con ella
yo creí
cualquiera creería
es el punto de la técnica
es eficaz
porque si al contrario de mi pierna izquierda
hubiera dicho barriga oreja
o mi pulmón derecho
él también habría dicho
que mi dolor era por mi madre
comencé a llorar mucho
en ese momento
y el psicólogo
como un entrenador experimentado
de las sensaciones afectivas de los otros
me estaba diciendo en voz alta
para liberarme
¡libérate! ¡libérate! ¡libérate!
entonces yo miraba aquella almohada
llorando
aquella almohada que hacía mi pierna
izquierda doler
y dentro de mí
con aquella voz en off que
todo mundo tiene en la cabeza
le decía
¡yo te libero! ¡yo te libero! ¡yo te libero!
al final de la sesión
a pesar de sentirme en pedazos
y pesada como un yunque
y que nunca entendí muy bien para qué sirve un yunque
estaba feliz apenas
de abrazar aquella almohada
roja
en vez de molerla
a palos
***
toda la escena es un poco patética
por ser extremamente real
es patética
incluso la parte del basurero
que sólo es real en mi cabeza
y ahora en este pedazo de papel
que ni es papel pero una idea de papel
pero que también es real
también es patética
no sé si es realista
pero yo me esforcé mucho
para dejarla un poco parecida
a un dibujo animado
y así puede volver
al lugar de donde nunca debería
haber salido
el universo infantil
las personas creerán que
debo ser medio bipolar
o afecta a grandes paradojas
pero la verdad es que consigo
entender a las personas que aman
a sus madres
y también entender a las personas
que no aman a sus madres
así como así
pero la razón por la que me encanta
este poema
no es solamente por las imágenes escatológicas
que representa
sino por ser bastante versátil
corta hacia dos lados
si alguien quisiera por ejemplo
moler al padre
es sólo colocar al padre en lugar de la madre
y con pequeños ajustes
creo que también funcionaría
en mi caso
pensé que calzaría como un guante
en un contexto literario
por ello me permití reescribir
este poema
apuntando exactamente a dicho fin
aún no acabó
estoy tratando de encontrar un poema
un borrador de un poema que escribí
hace algunos años
donde hablo de que quería moler
la literatura
a palos y colocar
los restos de ella molida
en una bolsa de plástico
como si fuera otro tipo de plasma
y después colocar la bolsa en la basura
porque el camión de la basura
siempre viene a recoger la basura
de mi edificio de noche
los lunes miércoles y viernes
entonces los hombres del camión
se llevarían la bolsa de plástico
con ella desmantelada dentro
para el basurero público de la ciudad
que yo no sé bien dónde queda
pero sé que queda
muy lejos de aquí
y pronto
comenzaría así una nueva fase
de mi vida
no encuentro más este poema
no tengo idea si ese borrador
aún existe
pero tengo la impresión de que
en aquella época
yo no estaba tan preocupada
en la riqueza de los detalles
creo que no hablaba del plasma
ni del basurero
estaba sólo concentrada en los palos
independientemente de haber o no
hablado del basurero
van a llamarme poeta ingrata
artista desnaturalizada y decir
que no tengo corazón
ya intenté resolver esto*
*esto=las ganas de moler
la literatura que siento
de vez en cuando y el juicio
negativo de las personas sobre este
mi posible acto de liberación interior
de varias formas
hasta psicomagia
hice el año pasado
me aconsejaron
entonces lo hice
tomé 900 pesos
que recibí por la publicación de un poema
y pagué 900 pesos
por la sesión
y me hicieron creer
porque yo estaba sugestionada
por técnicas psicológicas
de manipulación
que la literatura era una almohada
roja
y que el dolor que comencé a sentir
en mi pierna izquierda
en el momento en que estaba hablando
mal de ella
estaba relacionado con ella
yo creí
cualquiera creería
es el punto de la técnica
es eficaz
porque si al contrario de mi pierna izquierda
hubiera dicho barriga oreja
o mi pulmón derecho
él también habría dicho
que mi dolor era por la literatura
comencé a llorar mucho
en ese momento
y el discípulo de jodorowsky
como un entrenador experimentado
de las sensaciones afectivas de los otros
me estaba diciendo en voz alta
para liberarme
¡libérate! ¡libérate! ¡libérate!
entonces yo miraba aquella almohada
llorando
aquella almohada que hacía mi pierna
izquierda doler
y dentro de mí
con aquella voz en off que
todo mundo tiene en la cabeza
le decía
¡yo te libero! ¡yo te libero! ¡yo te libero!
al final de la sesión
a pesar de sentirme en pedazos
y pesada como un yunque
y que nunca entendí muy bien para qué sirve un yunque
estaba feliz apenas
de abrazar aquella almohada
roja
en vez de molerla
a palos
***
no sé por qué todo mundo dice “pucha”
y cuando van a escribir poemas
acaban escribiendo “vagina”
¿esto es para acercar su pucha a la boca
y distanciarla del culo?
¿será que yo misma ya lo hice
inconscientemente?
de cualquier manera
si ya lo hice también
de ahora en adelante
no lo haré más
Traducción de Sergio Ernesto Ríos
Nota
No recuerdo exactamente cómo escribí estos poemas. Fue en 2019, había sido invitada a la antología Uma alegria estilhaçada: Poesia brasileira 2008-2018; entonces escribí este poema, que es un poema doble. No es la primera vez que “mi madre” o la “figura materna” aparece en mis textos, y también asociada a la literatura. Tal vez sea una obsesión, quizá sea apenas un topos o un lugar común, no me importa mucho, en verdad. Hay algunas cosas que me gustan en este poema, pero me es especialmente grato haber escrito buceta[*] con “u”, y eso que es tan banal ese cambio, pero, si pensamos claramente, en la misma antología en la que se publicó este poema es posible leer en otro texto de alguien boceta, siguiendo la “norma culta”. En fin, cuestiones de estilística. No sé cómo se dice buceta en el español de México. Cuando estuve en Chile, en Concepción, el año pasado, presenté otro texto que también tenía buceta en medio. Tengo que encontrar mi cuaderno de aquella época para saber cómo tradujimos.
Me gusta escribir poemas que no se parecen tanto a los poemas, con aquello que las personas esperan que sean poemas y que tarden un poco en percibir que realmente lo que hago son poemas. Creo que me conecto con la tradición de la antilírica, cultivada por poetas que admiro. Me gusta la poesía, pero la poesía más allá de ser una cosa increíble es también algo muy cursi. Pero una cosa cursi que es chingona, ¿o no? Me siento maldecida (que es lo mismo que decir bendecida) de ser una poeta y de escribir poemas.
Érica Zíngano (Fortaleza, Brasil, 1980). Es poeta, artista visual y performer. Realiza un doctorado sobre Literatura Brasileña Contemporánea en el Programa de Posgrado en Letras de la UFC. Es autora de fio, fenda, falésia (ed. de autor, 2010), en colaboración con Renata Huber y Roberta Ferraz; Pé-de-Cabra ou Rabo de Saia —Eis uma Dúvida Cruel! (Oficina do Cego, 2012), en colaboración con la artista Alexandra Ramires; Ich weiß nicht warum–Zeichnungen und Texte für Unica Zürn (Hochroth, 2013); y del libro colectivo —Lotto Thießen, Nathalie Quintane, Marion Breton, Rob Packer, Odile Kennel, Mercedes M. e Marília Garcia— en lenguas no maternas eine Sache für eine andere (Bulky News Press, 2017).
[*] En la traducción del poema se optó por relacionar “pucha” y “vagina”.