ISSN: 2992-7781
REVISTA DE LITERATURA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MÉXICO

Cinco poemas

Neide Archanjo

 

 

Espera

 

Octubre

y ninguna palabra te alcanza.

 

Se marchitan las flores

y otras enmohecidas

sueñan.

 

Ellas

(las flores) te esperan.

Mi cuerpo te espera.

 

Yo, no.

 

 

 

Resentimiento

 

En las rosas de la ausencia

te celebro.

 

Ya no me apasionas

ni me iluminas.

Lenta es la pérdida

que respira.

 

Y primerizo es este poema

que aún canta

lo que ya no puedes ser.

 

 

 

Profundamente

 

Están todos sentados esta noche.

Están todos sentados.

 

La vieja mesa respira

pero nada se aquieta.

 

Están todos sentados

muertos y sentados.

 

Y este amor no basta

para lamentar los besos los nombres

los retratos.

 

 

 

Lo inesperado

 

Estoy quedando sola

frente al mundo

frente a los amigos

y peor

frente al amor.

Estoy quedando sola

frente a Dios.

 

¿Pero eso no

se suponía que pasaría

más tarde

mucho más tarde?

 

 

 

Volkstrot

 

Amo mi Volkswagen

como amé a mis mascotas

mis libros

mis rosales

mis amores.

Es un amor de cinco sentidos.

Con él atravieso

viaductos calles

veo personas

pienso en tanta cosa

escucho la radio

transporto a mis amigos

reteniendo todo por más tiempo

—retina corazón.

Y con él me quedo sola.

Vamos en la velocidad media

de 60 km, tiempo

para ver la vida

detenidamente

sin que nada se pierda

en el trayecto

en el paisaje

en la preferencia

en el cambio de dirección.

Mi volks es blanco

y tiene un aire limpio delirante

aturdido de saudade

con sus 1 300 caballos en el motor.

Es ángulo.

Más:

es ave.

 

Aunque Drummond diga

que lo que siento y pienso

aún no es poesía,

procuro mantener la misma mirada idílica

y hablar de cosas graves

sin ser grave.

 

Porque siempre fui demasiado seria.

 

Tomé las cosas y a las personas

con pasión

y quise tener en todo

la sensación absoluta

de estar haciendo algo

limpio y bueno.

 

Después vino el humor

Y ganas de reír

reír por dentro

sin exageración

concentrada

como un animal.

Esto no impidió la conmoción

ni el ser sincera a cada minuto,

apenas expuso el ojo desnudo

a la claridad del día.

Y me quedé viendo limitado

pero nítido.

Casi completo.

 

Ya no tengo espanto

frente a una flor

pero me gustan las flores

incluso esa frente a mí

que murió ayer

por causa de la sala cerrada

de aquel olor a humedad

a pesar del buen clima intentando

traer la primavera de fuera.

 

Es mi sala.

Luz de mercurio encendida

mesa

objetos

libros

gavetas

el sofá azul

dos teléfonos sin línea

(¿PBX cargado

o mal humor de la telefonista?)

tu retratito

blanco

negro

verde

colorido

un paisaje de Mira

y la ausencia total de ventana.

Pero yo sentada

hablando y escribiendo cosas

que no sé

que están en los códigos

leyes

resoluciones

jurisprudencia

doctrina

correcta

disciplinada

y cierta

(sin la desesperación de los primeros días)

contenida por una mano

que no es la mía.

 

Traducción de Sergio Ernesto Ríos

 

Neide Archanjo (São Paulo, Brasil, 1940-2022). Poeta, abogada y psicóloga. Fundó el taller literario de la Biblioteca Mário de Andrade, en São Paulo. Fue becaria de la Fundación Calouste Gulbenkian en calidad de poeta residente en Portugal y asesora de la Biblioteca Nacional. Publicó su poesía reunida bajo el título Todas as horas e antes (A Girafa Editora, 2004), por la que recibió el Prêmio Jabuti de Poesia y el Prêmio de Poesia da Academia Brasileira de Letras.