En un mundo 

sin aguacates,

Kemonito

en el desierto

de Sonora

sobrevivió.

 

Le lloraba a su padre

por la soledad,

y soñaba que comía

chilaquiles verdes

con jamón.

 

Un día salió del desierto

y encontró flores

junto a Chica Tormenta.

 

Recorrieron ciudades,

chocaron carros,

robaron Cheetos de bolita

y gomitas de osito.

 

Ella era rubia

y grababa tiktoks.

Luego, 

decidió buscar

a un Pikachu

más grande

que el sol.

 

Y fue así

que terminaron

en Tokio.

 

Nunca dieron

con Pikachu.

Chica Tormenta

entristeció

y Kemonito

preparó galletas.

 

Tus galletas

saben a tocino, 

¿cómo lo hiciste?

 

Chica Tormenta

propuso ir al mar.

Kemonito llevaba flotis

de hombre araña.

 

Chica Tormenta

era alérgica

al camarón,

y Kemonito

le cantó.

 

Kemonito

trajo vino de caja

y al llegar la noche,

en plena putifaceta,

descubrieron

que era imposible

un beso de tres.

 

Y siguen por el mundo

buscando a Pikachu. 

 

Nota

 

Dos de tres caídas es un bebé pokémon que comenzó a engendrarse en el taller de poesía de Grafógrafxs. A lo largo del poema se narran las aventuras de Kemonito y Chica Tormenta, invocando a la lucha libre mexicana, a los escenarios postapocalípticos y a las frituras del gatito Chester. En realidad, no hay un lugar fijo o cómodo en el poema; para disfrutar hay que desconfiar de las primeras impresiones, porque el caos es meditado y un final abierto puede ser más conveniente que sentenciar a lxs personajes al génesis. 

 

Patricia Huerta Lozano (Morelia, Michoacán, 1998). Colaboró con un retrato poético en la publicación Selfie poética (2020) a cargo del Complejo Cultural los Pinos. Es coordinadora del club de lectura para adolescentes de la UNAM Centro Cultural Morelia e integrante del taller de poesía de Grafógrafxs.