ISSN: 2992-7781
REVISTA DE LITERATURA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MÉXICO

Libros y lecturas de Daniela Albarrán

 

 

1. ¿Qué representa para ti un libro?

El libro como objeto no representa nada para mí. Aunque en mi primera juventud sí soñaba con tener una gran biblioteca, ahora ya no. Pero si pienso en un libro como concepto inmaterial, significa la oportunidad de tener una conversación con los ideales de quien escribió ese libro.

 

2. ¿Qué autores jugaron un papel fundamental en el desarrollo de tu vocación?

Pienso mucho en autores que leí en mi adolescencia, porque ellos fueron fundamentales en mi desarrollo lector. Un libro que recuerdo mucho es Un hombre acabado, de Giovanni Papini, porque el inicio de esa novela, aunque habla sobre una persona que se siente profundamente sola y fea, me ha hecho compañía en momentos muy tristes, y porque el personaje se entrega en cuerpo y alma a la literatura. Creo que esa es una decisión muy valiente. Otro, Demian, de Hermann Hesse, que quizá es un cliché porque todos leímos esa novela en nuestra adolescencia y ese libro me llevó al estudio de las religiones. La historiadora, de Elizabeth Kostova, porque cuando leí ese libro me di cuenta de que quería dedicar mi vida al estudio de la literatura. Cumbres borrascosas, de Emily Brontë, también lo recuerdo con mucho cariño, porque lo leí un domingo echada en mi cama, y no hice nada más que leer ese libro durante un día sin parar. Eso es algo que en la edad que tengo no puedo permitirme, y siento que la ambientación de cumbres es algo que me ha perseguido en todo lo que escribo. Ya entrando a mis veinte, definitivamente Moby Dick, de Herman Melville. Me obsesioné mucho cuando Ahab le pregunta a Ismael por qué quiere viajar si todo el mundo es exactamente igual a lo que tiene frente a sus ojos.

 

3. ¿Qué te han regalado los libros?

A veces mucha tristeza, a veces compañía, a veces nada.

 

4. ¿Cómo te fuiste introduciendo en el mundo de la lectura?

Toda mi primera infancia mi mamá me leía cuentos antes de dormir, tipo el Gato con botas y Caperucita. Fue un hábito. Pero creo que tuve dos momentos en los que ya no hubo vuelta atrás. Cuando iba en segundo de primaria tenía una maestra que era muy mala, y cuando nos portábamos mal nos leía como castigo. Recuerdo mucho que nos leyó Colmillo blanco, de Jack London. Nunca lo terminamos en clase, pero mi mamá me lo compró. Me tardé meses en terminarlo, y cuando lo logré no podía de la tristeza de que Colmillo muere por salvar a su amo. Con ese libro comenzó mi obsesión por seguir leyendo. El segundo momento fue en quinto grado. En ese entonces las escuelas públicas tenían, afortunadamente, el programa Rincón de Lectura. Igual nos daban libros en préstamo, era azaroso, y a mí me tocó uno que se llama La granja Groosham, de Anthony Horowitz. Lo leí en las vacaciones y me gustó mucho. A partir de ahí leí los pocos libros para adultos que tenía mi mamá en su biblioteca, que mayormente eran de superación personal, y cuando iba a la secundaria todo el dinero que me daban para el recreo lo juntaba para comprarme libros. Igual mi mamá me compraba libros, pero en ese entonces no eran suficientes, así que yo tenía que sacar dinero de donde fuera para comprarlos.

 

 

5. ¿Qué libro que leíste en tu infancia sigue rondando en tu cabeza?

Colmillo Blanco y La granja Groosham, aunque también me gustaba mucho leer Niña bonita y La sopa de piedra, que eran cuentos de los libros de lecturas de la primaria.

 

6. ¿Realizas lecturas unitarias de autores —para captar su espíritu— o lees una novela de uno y otra de otro?

Depende. Si me obsesiona el autor o la autora, sí puedo dedicarme un rato a leer toda su obra. Cuando la lectura es para una investigación académica tengo que hacerlo, pero normalmente leo una novela de alguien y no le sigo con el resto de su obra.

 

7. ¿Qué libros están presentes en los tuyos?

Bueno, hasta ahorita sólo tengo una novelita. En ella está presente Crimen y castigo, de Fiódor Dostoyevski; Lolita, de Heinz von Lichberg, y Por favor, cuida de mamá, de Kyung-sook Shin (sobre todo en el narrador). Leer este último libro me dio mucha claridad en lo que quería respecto a la forma de narrar. La serie Hannibalme guio mucho respecto a cómo construir una historia, estructuralmente hablando. Creo que las series y las películas de terror son una muy buena forma de ver cómo estructurar historias. Y Lawrence Durrell. Creo que El cuarteto de Alejandría es “la obra” del siglo XX, y quise construir una ciudad como él lo hace con Alejandría. Actualmente estoy escribiendo mucha poesía-ensayo. En este caso mis referencias son: Tania Tagle, Luna Miguel, Olivia Teroba, Rumena Bužarovska, Dahlia de la Cerda, Paola Carola, Annie Ernaux y mi algoritmo de TikTok, sobre todo, porque son a quienes he estado leyendo y últimamente estudiando. TikTok, porque es contenido que consumo diariamente, entonces ya no puedo crear nada que esté separado de las redes sociales.

 

8. ¿Qué libros has releído?

No releo libros completos, a menos que lo necesite hacer para algo específico, pero siempre que puedo releo Ítaca, de Constantino Cavafis, es mi poema favorito. Leí varias veces 2666, de Roberto Bolaño, porque estoy terminando una tesis sobre ese libro. Pero sí releo ciertos párrafos de algunos libros que he leído.

 

9. ¿De cuántos libros está compuesta tu biblioteca y qué podemos encontrar en ella?

 

Hace poco me mudé y no me llevé ningún libro. Eso me parece importante, porque en algún momento de mi vida quise tener una gran biblioteca; ahora es algo que no me interesa. En mi anterior casa tengo unos 200 libros, entre los que se encuentran, sobre todo, novelas decimonónicas, mucho siglo XIV de Europa. A lo largo de los años he ido regalándolos, a bibliotecas, sobre todo. Sólo me he quedado con libros que representan un objeto significativo para mí. Pero mi biblioteca importante se encuentra en mi Kindle. Uso también Bookmate. Ahí todo mundo puede ver los libros que tengo en mis estanterías.

 

10. ¿Cuál es el libro que te ha impresionado más y por qué?

Es una pregunta muy difícil, porque muchos libros me han impresionado de diversas maneras. De pronto se me viene a la mente Tan poca vida, de Hanya Yanagihara, porque habla sobre las autolesiones, un tema que para mí ha sido muy duro en diversos momentos de mi vida y fue la primera vez que lo vi en un libro. Justo en este momento estoy leyendo una novela que se llama Cadáver exquisito, de Agustina Bazterrica, y qué bárbaro. Es sobre canibalismo, un tema que me apasiona. Me encanta cómo lo trabaja.

 

11. ¿Qué significa para ti publicar un libro?

Algo casi imposible de que suceda.

 

12. ¿Con qué autores te nutres actualmente?

Actualmente estoy leyendo mucho ensayo autobiográfico, justo porque tengo un proyecto de escritura de ensayo-poema autobiográfico. Estoy leyendo a autoras mexicanas, que son las que estoy estudiando.

 

13. ¿Qué tipo de libros te producen antipatía?

Muchos, pero ni siquiera los volteo a ver. No pierdo mi tiempo con ellos, ni para nombrarlos.

 

Daniela Albarrán (Toluca, Estado de México, 1994). Es licenciada en Letras Latinoamericanas por la UAEMéx. Ha participado en diversos congresos nacionales de literatura y publicado cuentos en Monolito, Grafógrafxs y Castálida. Es autora de la novela La ciudad se camina de noche (Grafógrafxs, 2020) y del libro de poesía La escuela (Grafógrafxs, 2020).