Big Daddy se despide sin pegarle a la pelota[*]
Luis Alberto Arellano
Terry Francona es lo mejor que le ha pasado al juego
En segundo lugar puedes poner cualquier Grand Slam que hayas visto
Y también de tercero en la lista, que hayas oído o leído
A paloma desintegrada por la recta de Randy Johnson
Eres increíble
Como el Nono de Dock Ellis en Pittsburgh el dos de junio del setenta
No hit No run
Y Randy Johnson se retira con otro igual pero menos ácido
Esto es América
Puro pinshi bisne
A las seis péeme del treinta de abril del setentaicinco
Cayó Saigón y terminó oficialmente la guerra de Vietnam
Se trata de dos guerras de liberación colonial conectadas por la pinche
Necedad gringa de no cederle territorio al fantasma comunista
Los vietnamitas pelearon primero contra los franceses para que se fueran
De su territorio
Y una vez que mostraron simpatías con los rojos
Tuvieron que lidiar con los gringos y su mal humor extemporáneo
Nada como un baño de Napalm para calmar los ánimos
El juego continuaba, sin la simpatía de las mayorías, sin jugadores reclutados
Lo que permitió que muchos jugadores de medio pelo se volvieran estrellas
O debutaran siquiera en grandes ligas
Gran época para el juego
Nadie era menos que nadie
Los Red Sox perdieron la serie mundial de ese año maldito del señor
En cuatro de siete juegos frente a Cincinnati
El sexto tuvo doce entradas y lo perdieron en el fengüey parc
Fue patrocinado por el Vietcong y sus carcajadas transatlánticas
Digamos que te salvas
Que no te caen con veinte años por homicidio
cuando debiste caer como todos
digamos que tiras bolas de cien millas por hora
rectas
curvas
con efecto
de doce a seis
que te huele el aliento a opio
y la migra no te conoce aún
Renunciar cuando no eres nadie
No es renunciar
Es lucir elegante en la quinta entrada
Como todo shore stop
Con la mano izquierda llena de tatuajes
Terry Francona ha llevado su magia de un equipo a otro
Ordenado como un manual de geología
Militar como heroína de pureza cuatro
Como tormenta de arena y lluvia de sal
Jinete del apocalipsis pero con buena actitud
Termina el trabajo y Terry lleva a los Indios de Cleveland
A tierra santa
Cada octubre hay tierra santa en el continente americano
Nunca mates a un policía
Tómalos por pares
Luis Alberto Arellano (Querétaro, 1976-2016). Es autor de Erradumbre (Mantis, 2003), De pájaros raíces el deseo (Écrits des Forges/Mantis 2006), Plexo (FETA, 2011), Bonzo (Ediciones El Quirófano, 2012) y Grandes atletas negros (Luzzeta, 2014). Algunos de sus poemas y ensayos han sido traducidos al catalán, árabe, inglés, alemán, portugués y francés. Tradujo Todo alrededor de lo que se vacía, de Linh Dinh, y Una probada de miel, de Bob Flanagan y David Trinidad.
[*] Big Daddy se despide sin pegarle a la pelota es el avance de un libro inconcluso que escribía Luis Alberto Arellano a partir de imágenes distorsionadas referentes al beisbol, de Ismael Velázquez Juárez, quien nos proporcionó estos poemas hasta ahora inéditos.