ISSN: 2992-7781
REVISTA DE LITERATURA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MÉXICO

movimientos inducidos por la acción del viento

Camila Assad

 

 

I. primer movimiento

 

el reloj de la cocina suena,

llega el tiempo en que el habla no se suelta

 

es necesario despedirse de mí

es necesario abandonar esta casa vacía y

cada vez más llena de significados

 

un periódico no es un periódico

son datos que comprueban que ya fuimos mejores

un anillo ya fue una promesa

una cuerda que no es sólo una cuerda

es tu amiga colgada

girando

apática y con la boca echando espuma

por la pérdida del anillo

confirmada en los periódicos

 

yo camino

intentando llenar

las habitaciones

con el silencio

de los pasos en falso

 

 

II. segundo movimiento

 

es necesario despedirme

eructar el almuerzo

olvidar la casa

las habitaciones los armarios

y sobre todo los

                               silencios

 

caminar errante

un paso más

hacia adentro de mí

hacia adentro de la noche

 

 

III. tercer movimiento

 

para Viviane Nogueira

 

es como regresar a mí misma

y es como encontrarme diferente

 

el sonido del agua como el barullo más primitivo

y familiar que conocemos

y olvidarlo sería más penoso que olvidar el alfabeto

o dudar de nuestra propia existencia,

porque fuimos peces antes de ser reptiles

y antes de ser aves,

porque nadamos en líquidos amnióticos

por cuarenta y dos semanas

en los vientres dilatados de nuestras madres

 

 

IV. cuarto movimiento

 

el sonido del agua como mi búsqueda por la cordura y

abrazo el sol con una zambullida indelicada,

soy castigada con quemaduras —leves

 

recordar que el mar como potencia de la vida y de la muerte

abarca en sí todas las metáforas del fin del mundo

 

 

V. movimiento fatal

 

el mar dentro de mí

al encuentro del mar verdadero

[y piso entonces en todos los mares del planeta]

 

el barullo del océano

como una canción suave

para adultos al borde de un colapso

 

el mar nunca cansa,

nunca osa cansar

paraliza y me asusta

como todas las cosas obvias

que se ciernen entre la atmósfera

                                              y el

                                              suelo

 

 

VI

 

comer la lluvia

con el estómago vacío

hasta sentir sed

correr al aire libre

desafiando los resfriados

que llegan más fácil

con el paso de los años

sentir el suelo desnudo

en la suela de los pies

plantarse

sin dejar raíces

acostumbrarse con el silencio

jamás encender las velas

o las lámparas

no sonreír en vano

gastar las horas

contemplando el

pasto árido

el día de mañana

va a ser inédito

igual a todos los otros

que ya vivimos

 

 

VII

 

tu anatomía era metafísicamente imposible

tenías los pies siempre helados

en el verano usabas calcetines de lana

que tu abuela cosía y en el

invierno usabas gorros para esquiar

comprados en las rebajas españolas

 

sorbías en la mirada el hambre de áfrica & la guerra de asia

devorabas los continentes con pesares y apegos

te hacías la chica lista

[pero la panocha siempre húmeda]

ropas largas para disfrazar el poco peso que ocupabas en esta tierra

y los cabellos enmarañados en un chongo incómodo

 

tu existencia era insoportable,

yo quería castigar asesinar estrangular

                                         a esa mujer

yo no aguantaba más su imagen

reflejada en mi espejo

todas las tardes mientras

pasaba labello por los labios

 

 

VIII

 

existe lo que queda en tierra firme

aceptando tu condición estática y

hambrienta, rogando misericordia

como el suelo no siempre sagrado

aunque siempre inerte,

y existen los árboles

que renunciarán a sus destinos

inmutables y entonces crecen

haciendo lío frutos y flores y

se asoman verdes por todos lados

[aún más en primavera

cuando son aún más árboles

                     y aún más vida]

 

existe también lo que se sujeta a ser movimiento

y fluidez siempre como las nubes en el cielo

que pasan fríamente cortadas por los árboles

                                extensas de la tercera estación

 

 

IX

 

no era el calendario y el tiempo lineal

no era la tierra azul y su geografía insana

que separa en continentes a las personas buenas de las personas buenas

no era esta idea de deleitarme con limosnas rasgadas

no era el clima frío los niños los felinos las sábanas sudadas

y la separación litigiosa entre los cuerpos presentes

no eran los veleros tan bien atracados

y berlín repartida antes de que yo naciera

y berlín bombardeada ante de que tú nacieras

no era nuestra falta de vergüenza

en la cara en los miembros en los genitales

no era el dolor de gritar su nombre en la noche

y no escuchar respuestas

no era el viento este que trae hasta a mary poppins

colgando en una sombrilla decorada

pero no trae tu rostro

no era sólo un poema

—y sería una novela exitosa

 

 

X

 

cierras los ojos con la esperanza de ver alguna cosa. sientes

vértigo al ver tus tripas digiriendo un galak. quieres mudarte

a río de janeiro. quieres ir a méier. maldices el sonido

automotor en frecuencia semisintonizada con su tun tun tun

tun cardiaco. estás tensa, aguardando alguna respuesta. tomas

dipirona para la migraña. vomitas el galak las tripas tú

vomitas río de janeiro. abres los ojos y no ves nada más allá del

cuarto caótico. crees que va a estar todo bien; es sólo porque

es el año del perro, fue sólo un día de mierda, fue un siglo arduo para

las personas de esperanzas, fue un enmarañado cabello de chongo

que ya trataste de quitar. vomitas las preguntas. tienes pupilas

y corazón dilatados y el sonido de la autocrítica pulsando en el automóvil

en la orla haciendo temblar la tierra la tarde y a todos. tomas la

tercera dipirona del día implorando por una pausa; mantén

distancia de la vida y come otro chocolate.

 

 

XI

 

yo te hablo de esa rueda metafórica

que hace del mundo un parquecito

tren fantasma vagabundo de corta

duración en un riel oxidado

 

comunicas, finges interés

en los movimientos sociales juveniles

pero tienes 137 años

lamentas la baja calidad de vida

en la ciudad tan enorme

donde reposas

junto a tantos otros cuerpos,

estás firme en la vida

un poco pálida

pero debe de ser la genética

 

andas asustada

como quien vio un payaso

entonces vamos a acabar con los circos

y con aquellos que tienen el sueño

de irse con el circo

 

pasas el maquillaje

para disfrazar tus lágrimas

 

estuviste llorando

justo en la época del carnaval

y tu mejor amiga vestida de unicornio

y la ciudad enterita vestida de unicornio

 

são paulo la mayor soledad

colectiva del planeta tierra

del sistema solar de la vía láctea &

yo te digo que mi universo

hoy eres tú que sonríes casi simpático

de modo que no sé con certeza

si es gentileza o deseo

 

estás intacto

sólo la brisa leve de la noche

te puede destruir

 

 

XII

 

mañana cuando el sol esté en un ángulo de 40 grados de tu cabeza

por la ventana derecha de una suite confortable vas a comenzar a pensar

puedes pensar en comprar handcrafts en bolivia

en inversiones, fees and loans y

cosas cuyo nombre y significado yo no sé

cosas palpables como el café armenio de la esquina

y el jugo natural de maracuyá de la tienda

 

puedes pensar en barcelona y sus ramblas,

en tus triunfos, tus partidas ultramarinas

advanced business classes en harvard,

pensar en el mar verde del caribe abrazando tus

piernas blancuchas en la arena caliente

drinks con razonable contenido alcohólico

comiendo lentamente tu cordura

 

vas a esconder las tragedias debajo de la almohada:

el padre tirado en el suelo sangrando hasta morir

la madre envejeciendo sola

la soledad de aquellos que perdieron

a los amigos de infancia

 

vas a gruñir a la soledad y dejarla cubierta

entre los edredones de la cama blanda

 

puedes pensar en la niña de trenzas

que habla demasiado sobre recetas de naked cake;

ella tiene pestañas claras y sonrisa fácil

y vas a desear que ella estuviera a tu lado

cigarros, comidas para dos, toque de cuerpos

cachetes rosas pezones rosas celulares bolo

¡dios mío de qué habla esta chica! dios mío

y va a decir i hate you como quien dice:

 

si yo no fuera un hombre-máquina te llevaría en esa maleta por el

mundo a mi lado bajo la almohada con mis tristezas,

por entre las sábanas, en mis zapatos, te comería en el café

con american toasts, te pasaría por mi cuerpo

como jabón, serías mi listerine y haría gárgaras

largas con tu sabor y jamás te escupiría por el desagüe que

engulle el mundo en su forma líquida, yo te escucharía cantando

en mi audífono, yo te llevaría por ahí en la bolsa de mis

jeans, yo sería feliz pero soy una máquina

 

 

XIII

 

debes saber que la palabra libertad suena tan bella

como la imagen de pájaros volando

pero no es real

[los pájaros son reales, pero nadie es libre,

ni aquel vagabundo de la estación de autobuses

que deambula por ahí hace doce años y medio]

 

*

sobre la libertad:

puedes tener certeza a los 15,

sospechar a los 18,

tener alguna convicción a los 23

pero ya a los 28 sabrás que es una estupidez

*

de hecho, todo es estupidez

*

en china, fíjate, no existen galletas de la suerte, para el azar

de los chinos, eso es cosa de gringos, así como el hot dog,

los cupones de descuento, la crema de cacahuate en el pan tostado

del desayuno, los suv, el prozac y la felicidad forzada, aquí en el hemisferio

sur todo es pecado, pero son fácilmente perdonables. yo tengo mala

memoria cometo un error hay fallas en el sistema yo pierdo el

tiempo tratando de explicarte estas cosas. tú quieres volar quieres

amar quieres gozar comer hot dog adentro del suv tomar prozac

sonrisa forzada, pero acuérdate que libertad es sólo una palabra bonita.

 

 

XIV. tentativa

 

detener la acción de los vientos

con una pared invisible

de dimensiones colosales

 

[200 x 120 metros cuadrados

                                   de concreto armado]

de aquellas que piden pixo que piden grafiti

que piden un minuto de

                                                silencio

por la sobriedad de los colores y de los días

 

de aquellas que mantienen el calor de los cuerpos

frotándose aunque                            distantes

incluso desistiendo de tocarse

                       porque

realmente importante es controlar el movimiento

                                                   del aire

 

 

XV

 

tu silencio corta las venas de quien anda por ahí desprevenido

 

Traducción de Sergio Ernesto Ríos

 

Camila Assad (Presidente Prudente, Brasil, 1988). Publicó los libros Cumulonimbus (Quintal Edições, 2017), eu não consigo parar de morrer (Editora Urutau, 2019) y Desterro (Edições Macondo, 2019).