ISSN: 2992-7781
REVISTA DE LITERATURA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MÉXICO

Fernando Corona,
El libro de los libros,
ISBN: 978-607-490-204-4, México,
Consejo Editorial de la Administración Pública Estatal,
2015, 141 pp.

Alma Alcántara González (Acambay, Estado de México, 2000). Es licenciada en Lengua y Literatura Hispánicas por la UAEMéx.


 

Un libro contenido en todos los demás

Alma Alcántara González

 

 

En El libro de los libros Fernando Corona, investigador de textos antiguos, nos presenta diferentes cuentos que se vinculan con el viaje a través de los libros. Con personajes heroicos, oficinistas, amantes de los libros o amantes del arte, los relatos abren un diálogo con los libros que habitan en nosotros, con los que aún no leemos y con los que todavía no conocemos.

Los primeros subtítulos narran, de manera explícita, el vivir entre libros: desde su compra, la simbología que rodea a los grandes títulos con ediciones exóticas, la lectura en ratos libres y en la espera en el elevador:

Otros buscamos El Libro contenido en todos los demás, es decir, uno cuyo contenido no se agota, pues no podría, en un solo ejemplar sino en todos los del mundo presente, pasado y futuro. Ese sería el Libro en los Libros, el Libro contenido en todo Libro, el Libro entre los Libros (p.35).

Uno de los relatos de El libro de los libros narra la travesía que tiene un joven después de una plática furtiva con unos críticos de arte que se encuentran en una galería. Tras ese encuentro, ese joven no vuelve a ser el mismo, empieza a experimentar la precariedad, la miseria, la tristeza. El sentir se vuelve insoportable. A la par, cada pieza de arte lo van envolviendo gradualmente, hasta que se hace uno con la galería.

Tal vez en otro encierro pueda el mío comunicar y compartir sus dudas. Tal vez no hay un afuera, sino una eterna galería de habitaciones y puertas (p. 92).

Cuando el libro ya ha atrapado al lector con sus mundos entre literatura y arte, el curso de los relatos se transforma, salta hasta tiempos míticos con paisajes en ciudades cuyas glorias se han reducido a sombras, donde los personajes se enfrentan al vértigo del devenir histórico.

Los años pasan, las épocas, los ciclos, y sigo junto a un muro vigilando las sombras que, aunque llevan rostro, deambulan extraviándose en caminos de sombras (p.127).

En El libro de los libros Fernando Corona no busca abarcar todos los temas que ha enunciado la narrativa a lo largo de la historia; sin embargo, hace un guiño a cristalizar la esencia que sí que permea en cada papiro, tomo o libro digital: el devenir del humano por entender la vida. Este libro es perfecto para el público que goza de la narrativa con un final abrupto, sorprendente. También es ideal para los que disfrutan las lecturas cuyas reflexiones permanecen largo rato después de terminado el texto.

Les dejo una última probada de la narrativa que puede encontrarse en este título de Fernando Corona:

Nací pirata y pirata he de morir, aunque no sé si ya la muerte llegó y entonces lo que temo con espanto es la vida acechando desde fuera (p.75).